Cómo empezó todo (PARTE 1)

How it all began (PART 1)

He trabajado con muchas marcas a lo largo de los años, grandes y pequeñas, y he establecido estrategias de marketing y ventas en una amplia gama de productos deportivos en el Reino Unido e Irlanda.

En 2012, estaba con uno de mis clientes emergentes: Responseball.

Glenn Robertson (el inventor detrás de Responseball) y yo conducíamos por los hermosos caminos de Cotswold después de haber tenido un día visitando a los clientes que intentaban lanzar su nueva marca.

Cuando salimos de Stow-on-the-Wold, conduciendo hacia Burford, comenzamos a lanzar ideas sobre "algo que podría cambiar el mundo de los porteros".

Estoy seguro de que lanzamos todo tipo de ideas locas, y nos divertimos con la lluvia de ideas, cuando de repente se me ocurrió.

"Lo tengo", dije.

“Todas las marcas de porteros trabajan arduamente para intentar desarrollar el mejor látex para guantes de portero y el mejor agarre. El problema, sin embargo, es que cuanto mejor es el látex (y por lo tanto el agarre), menos tiempo dura el látex. ¿El resultado? Pagas mucho dinero por un guante de portero con excelente agarre, pero ni el agarre ni el guante duran mucho. O. Pagas mucho menos por un guante que dura mucho más pero tiene poco o ningún agarre”

“¿Qué pasaría si desarrolláramos un spray”, continué, “que se pudiera aplicar a cualquier nivel de un guante para hacerlo pegajoso/adherente/pegajoso”

El coche se quedó en silencio.

La gravedad de lo que había dicho se hundió y Glenn y yo nos sentamos allí, los cerebros zumbando, con una sonrisa en nuestros rostros.

“Creo que lo descifraste”, dijo.

(Podría haber agregado ese fragmento ya que, para ser honesto, no puedo recordar lo que ninguno de los dos dijimos), basta con decir que puedo recordar el momento vívidamente y fue el día en que nació el guanteglu.

Para ser totalmente correcto, fue el día en que nació GloveGlue .

Fue solo un tiempo después, cuando estaba hablando con un colega de trabajo, Dan Hume, sobre este nuevo producto fantástico que estaba a punto de lanzar a un público confiado de porteros que cambió el nombre.

"¿Pegamento para guantes?" dijo, "sin la 'e' al final, ¿supongo?"

Y así nació el guanteglu.

Las cosas han avanzado un poco desde entonces.

La gama de productos se ha ampliado y está disponible en 14 países en el momento de escribir este artículo.


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